25 de septiembre de 2007 16:27
domingo, 30 de septiembre de 2007
Entre encuestas y aviones
25 de septiembre de 2007 16:27
sábado, 29 de septiembre de 2007
Los Umbral
Dicen que ahora lo van a publicar por fin. Será un hermoso homenaje al hijo, al padre recién fallecido, a la madre y esposa.
Lo leeremos, claro.
viernes, 28 de septiembre de 2007
Battiato Tres
Pero todo daba lo mismo. Entonces tocó canciones de Mondi Lontanissimi, en el escenario de enfrente de la Catedral. Cuando fueron, no se, las diez y media o no se qué hora y se iluminó la fachada y la vidrieras, con Battiato cantando aventuras interplanetarias y Giusto Pio dirigiendo a sus músicos, violines y tal. Fue una preciosidad.
Ahora la fachada de la Catedral lleva cubierta no se, año y medio largo o más. Al Ayuntamiento aún no se le ha ocurrido hacerle pasar el AVE por debajo para hundirla, así que tendrán que bombardearla, creo. Bueno, esa es otra película. Pero lo que es verla, hace tiempo que no la vemos. Battiato volvió años después, no se, unos cuantos, y le vi de nuevo. Más rockero que clásico, cuando Fisiognomica, él que despotricó contra la monserga africana. Qué tío.
En persona le vi cuando el estreno -y pase único- de su primera película, PerdutOAmor, así todo junto. Conseguí que me firmase al asalto -garabatease más bien- el libreto de la Misa Arcaica, cuando recién llegaba en taxi a la puerta de la Filmoteca. Yo, más contento que unas castañuelas, la peli, sólo pasable, él al terminar hizo una especie de debate y se hinchó a firmar mas cosas ya más descansado.
Para cuando cuelgue esto, le habré visto y espero habérmelo pasado la mar de bien. Y supongo que deseando que vuelva en formato sinfónico. Mientras escucharé un montón de veces el Unprotected. Y el Soffio al cuore di natura elétrica. Y el dieci Stratagemmi. Y alguno más. Recomendados quedan.
jueves, 27 de septiembre de 2007
Inmobiliario
en una esquina céntrica en el corazón de Europa.
Para entrar a vivir.
Razón:
Sr. Meidner
Museo Thyssen Bornemisza
Madrid.
Si pudiese, yo la compraba.
miércoles, 26 de septiembre de 2007
Dos tardes
El segundo de César Rincón, un precioso jabonero al que
la afición recibió con un suspiro de admiración
y a la voz de "qué bonito"
Miniferia de altura. Y al que le pese, que se aligere, que allí nos lo pasamos de fábula. Y se creó afición, vaya que si.
martes, 25 de septiembre de 2007
La radio en el coche
Estaba en la radio un locutor que conocía bien, porque era el que escuchábamos por las mañanas, mientras nos aseábamos y desayunábamos antes de salir pitando al cole. Señora, decía en directo mientras hablaba con una emocionadísima radiooyente, le están llamando a la puerta, vaya corriendo a abrir; y entonces explicaba a la audiencia que en ese instante un motorista le llevaba un ramo de flores de parte de su programa para felicitarle el cumpleaños. Luego volvía la señora en cuestión, llorando como una Magdalena de la emoción y comiéndose a besos a Luis. Luis Arribas Castro, menudo espectáculo de radio. Y sin la ayuda de los teléfonos móviles, confiando en que el tío que tenía que llamar al timbre de la casa de la señora, ramo en mano, a las 8.28, llamara a las 8.28. Don Pollo y Café Soley, aún me acuerdo de sus dos principales anuncios. Regalaba huevos; un fenómeno.
Aquel día, en aquel viaje, le telefoneó un señor y anduvieron hablando de sus cosas, no me acuerdo de cuáles. La cuestión es que Arribas Castro salió con una de las suyas. Amigo oyente, hagamos una cosa, hoy usted y yo nos comprometemos para que dentro de diez años, estemos dónde estemos, usted me telefonee otra vez y recordemos esta conversación que hemos tenido hoy, ¿qué le parece? Claro, el hombre entusiasmado, por supuesto Luis. Pues hablamos dentro de diez años.
Para mi, en aquel momento, diez años podía ser cinco minutos menos que la eternidad.
Pasaron diez años, y algunos más. No oí si aquel hombre le llamó o no le llamó. Luis anduvo de emisora en emisora, anduvo en amoríos con una mocita muy prometedora que terminó haciendo talk shows y que por el camino le partió el corazón y le dejó con una depre de caballo. Malas cartas. Y resurgió de sus cenizas para seguir dando la tabarra matutina en una emisora municipal. Allí, por falta de presupuesto, Arribas Castro en lugar de regalos para los ganadores de los concuros, prestaba sus libros. Dignidad en la decadencia. Todo un señor. Un día se murió. Pero ya casi nade se acordaba de él.
Muchas veces he pensado en aquella llamada en mitad de la autopista. Qué sería de aquél oyente con un compromiso a diez años vista. ¿Se acordaría Arribas Castro? ¿Se acordará algún otro oyente?
Como decía otro músico locutor, el tiempo vuela y el eco se detiene; una hermosa mentira. O no. Aquel eco sigue por ahí parado. Hoy me he acordado.
lunes, 24 de septiembre de 2007
Libros y libres
domingo, 23 de septiembre de 2007
De vacas y toros y madera (para tocar)
Uy, un botonico nuevo. Pone encuesta ¿Qué será? Total que le doy, pinpun y la cuelgo. Pues a ver.
LUNES
Marta me ha mandado una vaca. Una foto de una vaca, quiero decir. Aunque visto lo visto ya no iba a sorprender casi nada. Gracias Marta. Espero que esa foto no menoscabe tu prestigio, porque ya me imagino la conversación
-Una foto
-¿Una foto? a una vaca?
-Pues si ya ves, es para un coleguita
-Ah, ¿un pastor?
-No, para un pianista. Un pianista temeroso de que le disparen
-Ya. Um... oye, se hace tarde, me voy, vamos huyo...
MARTES
Pues si, tenía razón Marta, la de las vacas locas. Bueno, aproximadamente. Sobre el manzanillo y sotanillo, auque lo mío fue cita auténtica, el citado patinó. Reproduzco las palabras del expeerto en gafancias y bisojeces varias, Alfonso Ussía, que explicaba muy bien la cosa: "Según el Instituto de Ciencias del Mal de Ojo de España -que nada tiene que ver con oculistas y ópticos-, hay cuatro grados de gafes en nuestra nación. Cuatro estadios perfectamente establecidos pero no cerrados a nuevos descubrimientos científicos. En Italia existen catorce grados, y en La Laponia tan sólo uno, el Kurihaf, o lo que es igual, «el que rompe los hielos con su trineo y hace caer al agua a los que marchan detrás». En España, los gafes, de menor a mayor gravedad de influencias negativas, son el gafe, el gafón, el sotanillo y el manzanoide".
El sotanillo es el más peligroso y nocivo de los gafes de España. Contagia su gafancia al de al lado y él se va de rositas en casos de gravedad media y alta. (...) Conocí a un sotanillo experto en desplomar ascensores. Se subía al ascensor, pulsaba el botón del tercer piso, descendía en su destino, se despedía amablemente del resto de los usuarios, y cuando éstos esperaban que el ascensor subiera hasta el cuarto o quinto piso, éste se desplomaba y caía como un plomo. Hubo fallecidos en mi familia por vivir en el mismo inmueble que el sotanillo y compartir ascensores.
Como podéis comprender, un Nodisparenalpianista racionalista, frío y calcularod no cree en estas cosas jamás de los jamases, pero, por lo que pueda pasar, ando tocando madera.
Total que la fuente que oí era la de uno que, pese a tener perfectasmente claro los cuartro niveles de gafancia y pese a explicarlo con extraordinaria claridad persistía -y persiste- en cruzar al sotanillo y al manzanoide en forma de un pérfico híbrido al que bautizó como manzanillo. Lo que viene a confirmar eso: que es nombrarlo y meter un pie en el charco. Hala, pues botas de agua para todos.
Como no hay mal que por bien no venga, a cambio de gatos negros, martes y 13, pero de los de no reír y escaleras y tijeras abiertas, he recordado las andanzas del profeso Occhipinti y he dado con una guep de homenaje recopilatorio al maestro Capmany, de tan grata memoria para los admiradores de la lengua y los amantes de la retranca y de la sensibilidad pimentonera.
MIÉRCOLES
Otro premio, oye. Esta vez ha sido Carcajada, la espiral más jovial que uno pueda imaginarse. Jovial, si, y un poco zumbada, que tampoco es para tanto lo de mi garito. No se merece tanto elogio pero se agradece, por supuesto. Ya sabeis: no hay que perderse ni una Carcajada. Altamente recomendable.
JUEVES
No lo cito en lo de hoy, pero el manzanillo-sotalillo reparte su pérfido influjo y termina con un cierto mal rollo. Me sabe mal, porque me gusta que haya polémica, puntos de vista parecidos, enfrentados, mediopensionistas pero amistosos. Y curiosamente desde que ese ha impuesto -digo bien lo de "impuesto"- ciertas actitudes o talantes sin talento, la criminalización de las ideas es el pan nuestro de cada día. Y me da mucha rabia, porque mientras se navajeen los próceres será su problema. En cambio, no quiero que lo hagan mío. Buen momento para leer libros.
VIERNES
El viernes termina por ser un día aciadgo, pero no por lo que podría suponer. Pensándolo bien, se relativizan las calamidades. Y lo que parecía que iba a ser algo terrible se convierte en una chiquillada cuando vas y comparas. Hay una fortuna y cuesta verla. Así de tontos somos.
SABADO
Hoy toros. Miniferia, la he oído llamar de las Fiestas de la Virgen de la Merced. Buneo, Virgen no dicen, porque da mal rollo a los modernos. Ay, cuánto cobardica junto. Bueno, pues eso, toros fenomenales, siempre mejorable, eso es cierto, pero la verdad es que totos y toreros brillaron a gran altura. Y el público respondió. Y tres o cuatro jurarían en arameo. Pues peor para ellos. Bueno, ya haré una cróniquilla.
DOMINGO
Y hoy más toros. El nombre es José Tomás. Habrá cronicón. Si Dios quiere y el tiempo no lo impide. Y el resultado de la encuesta. Mañana, mañana.
sábado, 22 de septiembre de 2007
Fantasmadas
Bueno, a mi me gustaba El Hombre enmascarado, el fantasma que camina. Igual un día cuento una historia sobre uno de sus tebeos, ya veré. El fantasma que camina. Pues el del fondo de la pista, cubata en mano, a la búsqueda de cervatillas incautas, a ver si no. O si si.
viernes, 21 de septiembre de 2007
Amarillo
Bueno, cuestión: que ha puesto una estampa de Vermeer y me he quedado alucinado. Yo no se por qué, pero me atrevo a afirmar -total, como mucho me tirotearán el piano- que por estos lares nos fascina especialmente lo de Vermeer por la poca costumbre que tenemos. Al parecer, cuando hace ya un par de años o así trajeron al Prado casi toda la poca obra del holandés, se trató de la primera ocasión en la que su obra pisaba España. Y claro, en otras cosas pues aún, pero en lo de las artes, no hay quien nos tosa. Y lo nuevo, en cierto modo es Vermeer. O sea, que en lo de Tintoretto -insisto, era él- a todos se nos caía la baba porque era lo que tocaba, pero era más como de casa. O en lo de Tiziano. O en aquella de Velázquez que a mi me parece que me cambió la manera de ver las artes. Pero claro, lo de Vermeer, para el aficionado de aquí, pues era extraño, ajeno, lejano y hermoso, porque es de casa. De una casa que no es nuestra casa pero que podía ser nuestra casa si no fuera porque queda lejos. Y eso lo hace fascinante. Embriagados en lo cotidiano, barroco en lo sencillo, un encanto que ahí está y que descubrimos por primera vez. Un saloncito, una que borda, el otro que le toca el laúd a la chati, la chati que lee la carta, la pañoleta aquella tan blanca, el amarillo, el amarillo, con lo difícil que es el amarillo y nosotros allí, como entrometidos mirando por lo que los teatreros llaman la cuarta pared.
Me acuerdo que estaba a tope de gente. De aficionados, júligans y ocasionales, de abuelas y nietos, de pintamonas ligando con bobaliconas, de familias, de poetrastros y pianistas, un poco de todo. Pero todos con la boca abierta, alucinando. Como el de la fragua de Vulcano, no se si sabéis, que a mi siempre me ha parecido uno de los mejores retratos que he visto nunca, el de la boca abierta, ya digo. Otro día pego la estampa, me lo recordáis.
Bueno, pues dándole media vuelta a esto, me he acordado del pollo que le monté a uno en el Louvre, ese museíto de los gabachos, cuando me dice se fermé le galerí. Oye, qué dice éste, le pregunto a mi hermana. Pes que está cerrada. ¿Cómo que cerrada? Que si. A ver, tú, me voy para él, ¿qué dices tío? Y el tío explica que nesepaposible, porque falta pesonal, las vacaciones, las gripes, lo de siempre, que están en cuadro. Yo, que en francés sólo se insultar y mal, le pregunto si ese es el museo más importante de la Frans, que si pretende ser una de las mejores pinacotecas del mundo y que de qué van, jolín. Yenecomprenpás.
¿Tunocomprenpás? Pues yo menos, majo, que sois unos cutres, que me quedo sin ver lo de Vermeer, porque sois tan idiotas de dejar abiertos fransuases de cuarta regional y os habéis pulido a todos los holandeses de un plumazo. Con un par. Vuset an crayón, que insulto no es, pero que si se lo dices con la vena hinchada a un francés, al tío lo dejas a cuadros y tú te quedas la mar de tranquilo. Al menos tendréis a la vista a ls españoles, digo yo, ¿no? Güí, güí, mesié, y nos dice dónde tienen un Murillo y así o Velázqez, ya sabéis una cabeza de mujer, preparatorio de algo importante. Eso si, japos tostando a la Gioconda con los flashes, para contar y no parar, y que no se si sería cosa del calentón, pero bueno, tampoco me volvió loco. Bueno, en realidad, nunca me gustó, así que me quedé un poco igual.
Vale, o sea, pues nada, agradecerle al J (punto) que, sin quererlo, me ha sugerido este rollo que os he enchufado, hoy, que tampoco sabía por dónde tirar, pero que bueno, ha quedado arreglado, ¿no?
jueves, 20 de septiembre de 2007
Que trabajen ellos
No se, para regalos, sigo confiando en Sus Majestades.
Los Reyes Magos, claro.
miércoles, 19 de septiembre de 2007
Tu cara me suena
martes, 18 de septiembre de 2007
El primer libro
Y entramos. Y vamos cada uno a nuestro aire mirando nuestras cosas.
Busco un libro de un francés que he oído en la radio. Hay un programa que se llama La Coctelera, en la desconexión local de Antena 3. Es una hora al día de cosas distintas. Ponen discos modernos, hablan de libros, a veces hay entrevistas. Son cosas no muy habituales en el dial. Creo.
Llevan un tiempo leyendo a trozos cuentos de un escritor francés un poco raro que se murió joven y que tocaba la trompeta. Y que fue actor e ingeniero, y crítico de jazz y trasnochador impenitente. Y se murió hacía treinta y tantos años. Así que novedad, novedad, pues tampoco era.
Lo novedoso es que aquí no se le había traducido y se le conocía sólo de referencia. Ahora, la Editorial Bruguera había editado su libro de cuentos más conocido, El lobo-hombre, que era el que estaba leyendo en ese programa. La Coctelera. Ese libro era el que buscaba. En una mesa, porque en esa librería moderna ponían los libros en una mesa en lugar de en las estanterías de las paredes. Deberían llamarle mesería librada o algo parecido. Pero eso es lo mismo.
Esas motitas blancas que se ven en el lado derecho y los cuadricos de las esquinas del lado izquierdo son los reflejos y marcas del forro al escanear. Hay que forrar los libros, jolines, que luego se os ponen así guarrones y con la tapas curvadas que parecéis Erasmus leyendo novelones cutres Penguin de bolsillo.Okupas, que sois unos okupas.
Total, que localicé aquel libro de Bruguera, en una de las colecciones más celebradas, de extraordinarios títulos y un diseño de portada que me fascinó desde el primer día y que aún hoy me sigue gustando muchísimo. En esa misma, editaron El arrancacorazones y La hierba roja, que conseguí hace un par de veranos en una feria de viejo, y también algunos títulos de Heinrich Böll y el Curso de Literatura de Nabokov que me fotocopié no hace tanto. La cobardía de la reedición.
Compramos aquel libro y esa misma tarde, después de forrarlo, comencé a leer las aventuras y desventuras de Denis, el lobo bueno del bosque de Fausses Reposes, cerca de la carretera de Ville d’Avray, cuyas desdichas comienzan en cuanto le muerde el pérfido Mago del Siam. Esa curiosidad juvenil, ese mordisco me enfermó y me convertí en incansable seguidor de Boris Vian. Al puro placer de la lectura se une el de la pasión detectivesca, porque ir localizando sus libros es cosa de contraespionaje. Lo último que logré fue una obra de teatro fotocopiada y una edición argentina, comprada a unos amabilísimos libreros bonaerenses, de su primera novela.
Recomendarle es un poco arriesgado, porque a veces es raro, otras veces bastante animal y generalmente muy desconcertante, pero a mi me sigue encantando. Ya me deleito pensando lo que voy a disfrutar cuando relea otra vez más La hierba roja. Quien se atreva, ya sabe.
lunes, 17 de septiembre de 2007
Tocando madera
Aunque parezca que el manzanillo levite, tenga dos zapatillas del pie derecho y que no deje huella tras de si, fijaos que por donde pasó ya no crece la hierba.
Pues va el manzanillo al baloncesto. Y encima, para garantizar su malaje va y se deja entrevistar por el cenutrio delegado por la cadena del amigo que le hace la puñeta al ex-amigo, que en paz descanse. Venga, toma pantallazo. Y oye, mano de santo pero al revés. Los malos que nos emparan y que nos colocan los balones por corbatín. Íbamos ganando de diez y ahora, con apuros, les empatamos o les sacamos dos puntillos.
Claro, de un tío que levita cuando hace futin, qué podemos esperar. Lo mejor evitar al que levita. Y no soltar la madera.
Y a ver quién es el guapo que me lleva la contaria. Porque acaban de perder.
domingo, 16 de septiembre de 2007
La semana de los dos domingos
Duda metodológica: aunque esto termine pareciendo una semana británica, debería comentar algo del domingo de publicación en la semana siguiente, ¿no? Se admiten sugerencias.
Lunes
Encuentro unos papeles que me servirán para el guep. He de escanear y tal. Seguiremos informando.
Martes
Ay, la conexión se está crujiendo definitivamente. Por fin cambio la antena de piratear, pero parece que no es tan mágica como se prometía. Bueno, aquí la gente está de mediofiesta. A ver si comienza el cole y se pone las pilas.
Miércoles
el FutBlog cuelga en lo de la semana que él también me dio un premio de esos. Que si, que si, que ya lo reseñé en lo del primer resumen semanal.
Aparece, en aquello de las calles de Madrid que tanto se movían después de los aistís, Alicia. Fernando y yo lo podemos explicar todo. Bueno, si nos acordamos, claro.
Jueves
En la guep vecina El final de la cuenta atrás, es inminente (creo) la llegada de un nuevo capítulo. Hay que estar atento.
Led Zeppelin, lo que queda dicen que se reunen para un concierto. En su día dijeron que, tras la muerte de Bonham, no volverían a usar ese nombre. Ojalá vuelvan, pero no como Led Zeppelin.
Viernes
Hoy se cumple el plazo de Altea. Ya hay ganas de leerla. A ver si ha ido todo bien.
Sábado
Bueno, la conspiración tecnológica da un paso más. He cambiado de sitio el puente de mando de la piratada y la nueva antena del güifi va como un cañón. Bueno, cañón tampoco, pero tira. El que no tira es el teclado, que hace tiempo pierde la conexión y ahora ha decidido que no la encuentra ni por casualidad. Total, que por dos duros compro uno de la Señorita Pepis que va la mar de bien, no hace ruidito y no tiene botonicos raros que nunca usaré. Lo sencillo es bonito y a veces funciona.
Domingo
Acabo de ver que Altea ha vuelto. ¡Bien!Lo de El final de la cuenta atrás parece que está a punto de caramelo y sólo pendiente de cosillas técnicas.
También me doy cuenta de que en este Informe Semanal he escrito sobre el domingo anterior y sobre este, con lo que me sobran días. Bueno, pues vale. Lo terible sería que hubiese dos lunes, ¿no?
sábado, 15 de septiembre de 2007
Hola Ricardo
viernes, 14 de septiembre de 2007
A ver hoy
A ver, lo de hoy. Pues no se. Estaba mirando antes, en la fatigosa jornada laboral -gente, un repiro- a ver si me inspiraba y no., Que si Led Zeppelin, que si las fuerzas vivas de la democracia diciéndole a la peña que mire en los bajos del buga, que si vascos y vascas, que si Solbes le arreglan los piños. Pues evidentemente no, la cosa no tiene jugo bastante. O si, pero oye, estoy cansado.
Se me ha escachuflado el faro de la bici. ¿Y? Bueno, vale, a mi también me da igual, pero con la tontada, línea y media. El Musta- que es el moro que arregla bicis- me ha hecho un apaño, pero el faro no chuta. Seguimos, ¿y?. Bueno joer, que en cuanto los guardias empiecen a echarnos multas, como me pillen sin luz, me funden. Como la luz. Qué tíos, para hacer duros estos catalanes se las ingenian que no veas. No veas sin luz. Esto igual no lo entendéis, pero es humor diferencial .Te lo cuenta Eugenio (que en Gloria esté) y es que te partes, pero de verdad. El hecho diferencial es lo que tien, que es que a los de allende el Ebro se os lo tiene que explicar todo. Bueno.
Y ahora la estampa. Porque ya me dirás con qué ilustro yo ahora esto. Y con la conexión chunga, que parece Riquimartin, un pasito palante María, un pasito patrás. ¿Una foto de Riquimartin? Mejor me lo trabajo un poquito, ¿no?.
Por "poquito" me sale esto, y como me gusta pues lo pego. Y al que no le guste, pues que se vaya al blog de Pepiño Blanco, que también ha de tener su aquél. Que se llamama PepePasta, que parece una cadena de pizzerias del de Viajes Halcón. PepePasta la foto no Pepiño, ay qué lío todo.
Bueno, oye, que aún me queda un poco de Alhambra 1925 -la birra- y que me voy a oir a Sting con las Songs aquellas del Labrinth, con el laúd y tiodo aquello, que reconfortan el alma y engrandecen el espíritu. Que vale, que lo paséis bien y que hasta mañana, son sólo veinticuatro horas.
A esperar tocan.
PD: Y la bici sin luz, como me multen paso el cepillo, avisados estáis, majos.
jueves, 13 de septiembre de 2007
Los diccionarios
Éstos son algunos de los míos, mis favoritos. Llevamos la tira de tiempo juntos. Todos tiene su historia. Me caen bien.
A mi me gustan los etimológicos, que es como el culebrón de las palabras. Una que llega de Grecia, pero que por el camino conoce a unos romanos y le da un giro a su vida y cambia completamente de sentido. O aquella otra que se embarcó en una aventura americana y que a fuerza de comer papayas y beber zumos de maracuyá o del sol que le dio en el acento, trastocó la sustancia y descubrió un nuevo sentido a sus letritas. Yo vengo de Londres, pues yo de Berlín. Oye, pues a ver si nos combinamos y hacemos algo por aquí. Pues vale. Pues venga.
Las palabras son bonitas. Y sus casitas, así, tan ordenadas, un placer para sus admiradores.
miércoles, 12 de septiembre de 2007
El curso
martes, 11 de septiembre de 2007
El desastre... de la conexión
lunes, 10 de septiembre de 2007
Un helado
Éste es un helado napolitano. ¿A que tiene cara de majete?
Amanecía, ya digo, dos mañanas seguidas con un cierto solecito en mayo y ya era querer ir por la vida en mangas de camisa y gafas de sol. Yo usaba una cosa de aquélla extraña que se enganchaban a las gafas y que las convertía en dobles cristales que polarizaban el sol. Una especie de anteojeras, más o menos. Más cómodo y barato que andar con dos pares de gafas, perdiéndolas o sentándote sobre ellas por despiste. También recuerdo una camisa muy fina, de manga larga y estampada de flores y hojas en tonos marrón suave y beige sobre fondo blanco roto, un poco hueso, más o menos. Me gustaba tanto esa camisa. Sigo a la espera, esto de las modoas son olas que vienen y van, que vuelva lo de la cosa floreada para los caballeros. Entonces me pondré morado.
Pero sigo. Dos mañanas con luz, camisa estampada con flores y hojas suaves, justo lo imprescindible para dar un paseo. Una fotocopia, un tebeo, unos sellos, cualquier motivo era suficiente para encaminarme hacia Iñigo Arista donde había una heladería, que en invierno también vendía pan, o chucherías o refrescos o qué se yo. En cuanto asomaba la luz, un poquito antes de lo de las dos mañanas que cuento, ellos ya sacaban la nevera con los mantecados y los conos de barquillo. Allí, con sus palas, sus colores, las cucharitas esas de plástico transparente tan antipáticas que se rompen si las miras un poco fuerte.
Los helados, pues como el verano, ni fu ni fa. Que si, que me gustan, pero sin aspavientos. Según como, prefiero una horchata. Casi siempre, una fruta fresquita. Y puestos a dulces, pues natillas, flanes, leches fritas o las incomparables torrijas. Y los helados, pues poco, más bien poco. Si son dos al año, lo demás es exceso.
Pero esa tarde de paseo, camisa floreada en tonos tostados, solecito agradable, mi tebeo bajo el brazo, o las copias, o la revista de cine o lo que fuese, me gusta inaugurarlo con un cucurucho de moras. El sabor de las moras me pirraba. Me sigue gustando un montón. Y su color. Y que siendo el helado dulzón por antonomasia y poco dado a aliviar la sed, a mi el sabor de las moras me da la sensación de ser más refrescante que otros. Probablemente no tengo ninguna razón, lo se, pero contra ese tipo de impresiones, poco puede el raciocinio.
Cuestión: que hasta allí me llegaba yo, pedía un cucurucho normal, ni pequeño ni de doce bolas, de moras ¿sólo moras? Eso es, moras solamente, y me volvía paseando sin prisa por los jardincillos de las vueltas de las casas de Iturrama, esquivando a los chavales, a las mamás que perseguían a los chavales, saludando a los compañeros vecinos de por allí, y así mientras iba saboreado el helado, con esa cierta prisa que le echamos para evitar pringarnos hasta el tuétano.
Luego me volvía a casa relamiéndome como los gatos y a la espera de que el siguiente helado, al año siguiente, mantuviese el nivel.
domingo, 9 de septiembre de 2007
Cuenta atrás y músicas cuarentonas.
Pues estuvo bien el Informe Semanal, así que esta semana repetiré. Creo.
Lunes
Por fin estalla el proyecto de la cuenta atrás. Lié a tres amigos para ponerlo en marcha. Son amigos, me perdonarán. O no, pero nos divertiremos.
Martes
Cuento. Me salen doce leídos, de los que dos releídos, uno tres o más veces. Me quedan cuatro por leer. Sobre los ochenta, tampco está tan mal. Umbral, Paco, sigo oyendo.
Miércoles
Aprendo la palabra "boquerel", que vendría a ser los grifos de los surtidores de la gasolina. Tambíen pongo orden en las fotos. Están todas, menos el carrete que se quedó puesto en la máquina. Estoy contento.Jueves.
Bueno, me cae un premio de esos de reconocimientos entre blogueros de Néstor, un abogado sensato, rara avis, sin duda alguna.- No, en realidad son dos, porque Rocío Pampaluna también me regala otro. Estáis como regaderas, majos, pero se agradece el detalle. No os los perdáis y no lo digo por la insensatez del premio, sino por todo lo demás. Ya tengo The piper ath the gates of down.
Viernes.
Terrible, qué sueño. La parte buena es que ya estoy de vacaciones. Un día, no es mucho, pero es estratégico. Marta, muy rápida, cuelga en lo suyo la Cavalleria Rusticana cantada por Pavarotti.
Sábado
La conexión está fatal. Los fines de semana se cruje. Oigo The Piper. Es como el de siempre y por eso me sigue gustando. Ya casi están las fotos.
sábado, 8 de septiembre de 2007
Septiembre ya está aquí
viernes, 7 de septiembre de 2007
Una postal para Pablo
Pompeya no compensa.
Está hecha una ruina.
NDAP
jueves, 6 de septiembre de 2007
Lo prometido es deuda (II)
Pues bien, Jesús me dio dos nombres. Me dijo o ésta o la otra. La una ,Vanexxa y la otra, Sara da Pin up. Um, vale, pues a buscar.
Al final, y tras haberlas escuchado a las dos, me parece que la que oí fue Sara. Los dos discos se dejan oír, aunque la verdad, seguidos se hacen un poquito largos. Parecido a lo que le pasa a La Mala Rodríguez, que tiene uno soberbio y los otros pues no tanto, vaya. Pero si, un tostón lo de "qué malas somos te vamos a asustar". Me asustasi, que me de una taquicardia con tanto topicazo. Pero a quién se le ocurre escuchar las letras. De todos modos, de la Sara hay un par que me gustan mucho, mucho. Somos blandos.
Si os apetece buscar, encontraréis, Y además tienen sitio en el myspace ese que, la verdad, muy bien no se cómo va. Que no se si son propias esas páginas o si son ardides publicitaros, pero se se suelen poder oír cancioncillas o fragmentos o así.
Vosotros mismos, si os gusta bien, si no, pues a por otros. Se me ocurría que igual podía pegaros una canción y así le dábamos morcilla a la esgae y a Borau, que se ha puesto de sátrapa mayor en lugar del Teddi, que, cobardón, se nos ha licuado. Pero ya sabéis que soy un clásico, y que para las moderneces musicotécnicas, nadie mejor que Belen y sus esplendideces burbujiles. Por ciertó, seguimos a la espera de Led Zeppelin.
Bueno, por lo que a mi me toca, deber cumplido.
miércoles, 5 de septiembre de 2007
Cuarenta años después
Después de esa primera cinta, The Final Cut, que escuchaba y escuchaba, pese a que a casi nadie le gustaba, compré, claro, el Wish you were here, que me había fascinado y que me siguió fascinando. Me parece que tiempo después cato The Dark side of the Moon, que, la verdad, me decepcionó. Estaba demasiado hecho a WYWH, supongo, y DSOTM me cansó. Además, creía reconocer la zarpa de Alan Parsons sobre todo en la cansina y ñoña Us an them. Por aquel entonces, Parsons ya me empezaba a provocar urticaria.
Resultó que cuando cursaba primero de BUP trabé amistad con un pinkfloydiano. De hecho nos agrupamos unos pocos bastante locos por la música, tendencias sinfónicas, protopunquis y así, un poco de todo. Iba a referirme a Oriol, el otro pinkfloydiano. Resultó que un día hablando, me cuenta que su tía tiene todos los discos de los Floyd en vinilo. Dicho y hecho. Le paso la lista de los que me faltan y me froto la smanos al pensar que un día de esos, me los conseguirá. Y así fue. Unos días antes de Semana Santa me pasa la bolsa d elas maravillas. Obscured by cloud, Meddle, y otrs más. Allí etaba The Piper at the Gates of Down. Sin duda es el disco emblema d ela banda, por encima de todos los demás. Porque es el único que interpretó Syd Barret, el alma del grupo mientras estuvo, y una especie de fantasma desde que lo dejó.
En casa teníamos un tocadiscos Belter de esos tipo maleta. Maleta de plomo, todo hay que decirlo. De la tapa de desmontaban los dos altavoces, porque era estéreo y se podía transportan cogido del asa. Si uno había merendado bien, porque pesaba un rato. Un equipo de música aún era un sueño, así que ahora tenía los discos, pero me era imposible grabarlos. De hecho, me daba cosa ponerlos en el tocata por si se estropeaban y la tía de mi amigo se agarraba un mosqueo completamente justificado. Mi amigo Oriol se iba de vacaciones y le era imposible grabármelo así que me iba a resignar a quedarme con las ganas. Recuerdo que hice pruebas para grabar directamente, por el aire, con una grabadora de pilas junto al bafle y debajo de una cama, para atenuar ruidos. Del resultado no queda ni rastro en la memoria, como se puede comprender.
martes, 4 de septiembre de 2007
Dos cosas
Resulta que B16 ha dicho en una homilía dedicada especialmente a los jóvenes que hay que cuidar la naturaleza, porque es nuestra responsabilidad mantener la Creación. Bueno, pues he oido en Onda Cero -creo, salto de emisora en emisora como el Flick de la Abeja Maya- que para tal evento y para demostrar su compromiso ecológico, el Papa Benedicto había cambiado su vestimenta blabnca habitual por la verde Y lo mismo los curas que le acompañaban. Pero eo no es lo mejro: al parecer un memo de agencia ha soltado esa tontada y lo están repicando la tira de medios de comunicadión, con redactores analfabestias que no saben por dónde les da el aire.
Jo, no me aburro de alucinar con lo que le oí decir a otro memo en el pasillo dentral del Prado: oye, ¿esta de las madalenas que ya ha salido tantas veces quién es? Los curas de al lado eran los que concelebraban, y el verde ecológico, lo que toca en tiempo ordinario, el tiempo litúrgico en el que estamos. Y el verde, pues si, entre otras cosas, significa esperanza. Y lo que ha dicho B16 es lo lógico, claro. A mi me da que si hace falta aprender cultura religiosa, más que nada para enterarse de lo en El Prado o para no preguntarle a un judío si en su país también es típica la boina esa rarita en versión raquítica. Cosas mías.
Lo otro. Una idea que rondaba el piano hace tiempo. Al fin nos embarcamos a ocho manos y emprezaremos muy pronto. Se trata de una historia escrita entre todos, que ni se sabe cómo comenzará, ni por dónde seguriá ni si terminará como debe de terminar. Total, que no se tiene ni idea, sólo ganas de darle a la tecla y de juguetear con las palabras. Arrancamos cuatro y esperamos que se nos una alguno más. Recién colgada está la güep, que espero visitéis y tal. Ateneremos las sugerencias y, si nos convencen, estaremos dispuestos a recomponer la trama como haga falta. Invitados quedáis a participar.
(http://www.elfinaldelacuentaatras.blogspot.com/)
lunes, 3 de septiembre de 2007
El outlet
Al parecer tienen mucho éxito, porque, claro, se venden a un precio bastante más bajo del anterior, o sea que vendría a ser una rebaja pero a lo bruto. Y claro, comienzan las preguntas. Para mi que a la gente las marcas le molan. Pero mucho. Lo malo es que son caras. O igual es por eso. Claro, decir fíjate los calcos que me he comprado que cuestan cuarenta lechugas, pues no. Porque está mal visto. Y aquí abrimos un espacio para la esquizofrenia.
Las marcas molan mucho, insisto, pero está mal visto ser víctima del "marquismo". Item más, como el dinero está mal visto -por mucho que nos guste- está de pena decir que te has gastado una tela en estas cosas. Conclusión: al outlet éste y de cabeza, que aunque a la conciencia le suene igual de mal, al menos sale más barato.
La verdad, y llegados a este punto -se me permitirá-, la peña que anda en estas disquisiciones está como para replantearse tres o cuatro cosas, pero en fin. Somos tan chachis que no veas.
Pero no era aquí dónde yo quería llegar ¿No? pues menudo paseíto, majo. Ya, lo de siempre, me pongo y me disperso, pero ahora centremos la jugada. Cada cuál que haga con sus cuartos lo que pueda, y si prefiere pagar por un sellito para parecer lo que no es -o lo que si es- pues que con su pan se lo coma. Lo que me tuesta es que le llamen Outlet. Jolín, ¿no se puede llamar Almacén de saldos?. O Almacén de tarados, aunque eso pueda llevar a confusión con... bueno, eso otro día.
Pero claro, cómo vas a llamarle así a un sitio tan moderno y tan lindísimo y tan todo. A ver cómo vendes los restos de serie llamándoles restos de serie. O tarado a lo tarado. Pues nada, nada, importamos una palabra inútil para designar una cosa que ya tiene palabra en castellano para ser designada. ¿Incoherente? ¿La economía lingüística a tomarse unos vinos? ¿Idiotez discursiva? ¿Moda modorra?
Ya veis con qué tonterías me entretenía hace unos días cuando ví el letrerín del outlet para anunciar una tienda de gafas. Todo normal. Sobre todo cuando uno de los más ilustres tontos de España sigue empeñado en llamar accidente a los asesinados, por ejemplo. O cuando tontos sin lustre insisten en trufarnos de tontadas en aborigen el discurso para parecer no se sabe muy bien qué. Estos si que están de outlet, con perdón.
domingo, 2 de septiembre de 2007
De Umbral, Benedicto XVI, los homenajes y los fantasmas
Martes. Mala noticia, muy mala. Umbral se nos ha muerto en vida. Ahora nos toca leerle. Por fin publican en castellano el Jesús de Nazaret de Ratzinger y B16. Les costó mucho la traducción, dicen los editores de aquí. ¿Más que al inglés? Que al francés? ¿Que al italiano? ¿tanta cara de idiota tenemos? Belén me hace partícipe de su dedicatoria pinkfloydiana. Gracias, maja.
Miércoles. Al fin dejo las fotos para revelar. Mi tienda de siempre ya no coge revelados químicos. Me voy a mi otra tienda de siempre que, inasequible al desaliento, resiste las acometidas digitales. Con las botas puestas. Por cierto, Altea dedica una entrada a mi güep y a la de María (sin chat). Altea, campeona.Jueves. Me seguís haciendo la pelota, con lo que a mi me gusta... Estáis como regaderas, amigos. Marta me escoge para un premio de esos raros que has de escoger gente y pegar dibujitos o no se qué, Marta, criatura, si yo aún echo las fotos de carrete...
Viernes. ¿Pero qué habéis comido esta semana? Ahora es FutBlog el que me da el premio ese. Altea que no actualiza lo suyo y Belén que renueva su incipiente pasión pinkfloydiana. Luego cuando no me doréis la píldora tres días seguidos me rebotaré y se me desafinará el piano. Por favor, qué sueñazo tengo.
Sábado. Pues pensaba que no había nadie por aquí y, azuzando un poco, la cosa se ha animado. He tenido más suerte que el pobre Amatía, yo me he quedado con el castillo y él con los fantasmas. (¡Y gracias por la cita!)
Domingo. Pues a ver si voy repitiendo esta especie de resumencillo semanal oye, que también tiene su gracia. Venga, que ya estoy en lo de mañana. Qué presión, ¡ay!.
sábado, 1 de septiembre de 2007
¿Hay alguien ahí?
Entre la pereza y tal y que hay pocos comentaristas, no se, será como para ir haciendo turnos de fin de semana y que otro palo aguante la vela.
Bueno, para la inmensa minoría, si es que aún queda alguien por ahí, un castillo de Ortiz Echagüe. Porque me gusta.