lunes, 22 de octubre de 2007

Entre dos, me quedo con uno

Hace unos días, de pasada, revisando la cosa de la prensa, pero tan saturado que no me dio tiempo ni de aprehenderlo casi, vi un dibujo de mi cada día más admirado Mingote. Me encantó. Me pareció tan bien pintado, tan i9nteligente, tan suave, tan irónico, tan duro y a la vez tan sensato que no me olvidé. Junto diez minuticos y lo localizo.

Aquí lo pego, en los colorines de la guep. Yo lo vi en blanco y negro de papel prensa, que es como se han de leer las cosa. En papel, digo.






Luego lo otro. Unos que se rediseñan. Un profe que decía que cuando los diarios se rediseñan es que algo va mal, muy mal. En estas últimas semanas, tras la salida de Público esa espece de gratuito chungo que es tan chungo que ni es gratuito, se han rediseñado La Vanguardia y El País con acento en la I. bueno, pues bienvenido sea el rediseño. Me qued con tres datos: uno, el acento cutre que le han puesto en azulón, que no se por qué me recuerda al triangulico que le pusieron al Diario 16. Dos que en lugar de ser independiente y matutino ahora es "global y en español" que no tengo ni idea de qué quiere decir, pero que me suena a mamarrachada modernilla. Y tercerio un titular en portada, el primero de hecho, que reza tal que así: "¿Qué es esa enfermedad que no recuerdo? ¿Eisenhower?", para presentar una información y un texto del propio afectado, sobre el padecimiento que nos dijo ayer que padecía Pasqual Maragall.

Por mucho que el entrecomillado sea del propio Maragall, parece de un pésimo gusto, tanto para él. para el resto de gente que la padece y para sus allegados. Será que los mamporreros del grupo no le perdonan que aupara a la secretaría general del Partido al examigo que ahora les hace ir por la cale de la amargura. No se. A mi me parece mezquino, despreciable, asqueroso. Pero como no soy un progrechupiguay (creo) no tengo derecho a criticarlo. Pues vale.

Evidentemente, entre Mingote y los "globales", me quedo de largo con Mingote y me compadezco de un Maragall con el que poco he simpatizado, a veces nada, pero que siempre me ha resultado simpático y sobre el que lamento la desventura que le pueda venir enc

16 comentarios:

Belén dijo...

El sentido del humor siempre es inteligente, y es muy dificil el humor sin herir sensibilidades... a mi tampoco me ha gustado el chiste de Maragall

Besos!!!!!!

María dijo...

¿¿de verdad empezaron con ese titular?? ¡¡qué mal!! Yo ayer me levanté tarde y me acordé de golpe del "rediseño", me picó el gusanillo y fui al quiosco... no quedaban, fui a la tipica tiendita pirata pero de revistas, tampoco quedaban y llegué incluso a una tercere
-"Huy hija, si se nos han acabado antes de las 11"...
menudo éxito, pensé y me quedé con las ganas de echarle un vistazo. esta tarde en la hemeroteca de la facul... a ver qué tal.

Muy buena tu entrada, pianista!!

Anónimo dijo...

Pedazo entradón, Pianista. Vaya que sí.
Y también me apunto a la opción de Mingote: más sabia, más sensata y... más divertida.

Paco Becerro dijo...

Pobre Maragall, en cualquier caso.

Álvaro dijo...

Ya que estás hablando de periódicos...

El sábado me dispusé a hojear/ojear Público y, como ya me había anunciado un amigo, el periódico sólo contaba con cuatro anuncios...

Malos tiempos para la lírica...

Nodisparenalpianista dijo...

A mi, que lo haga el, me puede parecer hasta terapeutico, peor que lo destaque como primer titular de portada el periódico me parece un tanto cruel, Belén.
Gracias María. La gran novedad es el acento y que ha desaparecido lo de periódico "independiente". Igual ya era demasiado cinismo.
Gracias a ti también Marta, No se, tampoco me parecía para tanto mientras la escribí. Pero si gusta, pues mejor, la verdad.
Pues si, FutBlog, pobre tío. Ojalá vaya todo lo más lento posible y resista fuerte el mayor tiempo posible.
Es complicado de entender lo del Público, Amatía. Podemos apostar a ver si resiste hasta las elecciones. Una vez pasadas ya no tendrá sentido, supongo. Es raro, si.

Juan Vico dijo...

Estoy contigo, Pianista: lo cuestionable es su uso peridístico, cuenten o no con la connivencia del propio Maragall. Además, la mayor virtud de El País siempre ha sido la sobriedad, ¿no? Renovarse o morir, claro, pero sin perder las señas de identidad.

Nodisparenalpianista dijo...

¿Sobriedad, Jsv?
Don de la ebriedad... o eso era otra cosa.

Carcajada dijo...

Sí..la opción de Mingote parece la mejor..ayss..otras cosas tendrían que rediseñar..y para mejor, no lo que han hecho. BEsos

Altea dijo...

Es que el que no sabe hacer chistes más vale que cierre el pico. Y en general los políticos no saben.
Para eso ya están Mingote y compañía que, en efecto, no defraudan.

Nodisparenalpianista dijo...

Bien visto Carcajada, bien visto. Si es que cuando no se quiere...
No sólo no defraudan sino que nos hacen sonreir y hasta pensar, Altea. ¡Viva Mingote!!!

Juan Vico dijo...

Me refiero a que nunca han tirado de titulares efectistas. Partidismo, sí, pero con un estilo serio. Compáralo, qué se yo, con El Periódico , un pionero de esos aires populistas que cada vez soplan más fuertes sobre la prensa española. No me extraña que no tengamos prensa amarilla: no nos hace falta.

Anónimo dijo...

Muy desafortunado el titular sobre Maragall. No sé hacia donde va el periodismo... (suerte que estaré yo para reubicarlo xD). Y a mi me parece muy loable que Maragall reconozca su enfermedad. Yo creo que es uno de los políticos más sinceros que teníamos. Aunque se esté o no de acuerdo con él.

Lidia

Nodisparenalpianista dijo...

Bueno, El Periódico en particular y la prensa catalana en general, desde unas décadas hacia aquí, la veredad quee s para darle de comer aparte, Jsv. Y pensar que el primer director de El País tenía que haber sido Miguel Delibes.
AnónimoLidia, vas a tener trabajo para reubicar la cosa, pero es bueno que estés animosa. Maragall va atener más respeto que el que él ha mostrado cuando se ha burlado, por ejemplo en el caso de la Corona de Espinas. Porue sincero y pólítico (3%, etc) pues casi que no pega demasiado.

Anónimo dijo...

Sobre la enfermedad de Maragall parece ser que hay mar de fondo.

Apareció hace tiempo, y ya empezaba a dar síntomas en público. Montilla permitió y promovió que Maragall se pusiera en evidencia, porque así iba erosionando su imagen política (la de Maragall.

Así es como el PSC, de la forma más ruín, rastrera y miserable conseguía defenestrar a uno de sus miembros más incómodos.

Si bien el socialismo español no se ha caracterizado nunca por su lealtad ni para con ellos mismos (véase la tradición de la FSM de ir armados a las asambleas y acabar a tiros) ahora se han retratado como los más viles de los compañeros de viaje que se puede llegar a tener.

Maragall nunca tuvo ni mi voto ni mi aprobación; pero merece todo mi respeto y lamento mucho lo que le pasa. Y lo que le han hecho. Le deseo mucha suerte y mejores amigos.

Nodisparenalpianista dijo...

Siempre es bueno mejorar la suerte pero lo de los amigos es otra historia. En todo caso, cambira de compañeros a veces. No en vano, acaba de romper el carné. Hay mucho tomate, parece, si.