lunes, 28 de diciembre de 2009

70 es hoy (II)

(sigo)

El mal, en el Tercer Reich, había perdido aquella característica por la que generalmente se le distingue, es decir la característica de constituir una tentación. Muchos alemanes y muchos nazis, probablemente la inmensa mayoría, tuvieron la tentación de no matar, de no robar, de no permitir que sus semejantes fueran enviados al exterminio (que los judíos eran enviados a la muerte lo sabían, aunque quizá muchos ignoraran los detalles más horrendos), de no convertirse en cómplices de estos crímenes al beneficiarse con ellos. Pero, bien lo sabe el Señor, los nazis habían aprendido a resistir la tentación.

Hanna Arendt. Eichmann en Jerusalén

4 comentarios:

Dulcinea dijo...

Dios mío, qué miedo da ver lo poco que hemos aprendido de todo aquello.

Me contaba una amiga judía de origen ruso, que su abuelo y su tío abuelo pudieron huir del genocidio de Stalin. De allí escaparon a Nueva York y de allí a Buenos Aires donde ella nació. Nunca su abuelo contó nada del horror vivido. Sólo cuando su tío abuelo se demenció empezó a contar. Y se horrorizaron todos.

No piensa volver jamás a Rusia. NO le debe nada a un pueblo y a un estado que consintió tanto crimen, tanto miedo, tanta hambre.

Myriam dijo...

Genocidio segun el diccionario es:

Exterminio o eliminación sistemática de un grupo social por motivo de raza, de etnia, de religión, de política o de nacionalidad.

¿No? bien pues lo que estamos haciendo es España tanto con los niños o con los enfermos es exactamente lo mismo, espero que paremos a tiempo antes de que alguien tenga que pensar que no le debe nada a España por los mismo motivos que la amiga de Dulci.

Atiza dijo...

No tengo muy clara la afirmación final.

Nodisparenalpianista dijo...

La "tentación" del bien, Atiza.