lunes, 11 de febrero de 2013

El Papa

Dice la HermanadelPianista que en Benedicto XVI ve a un abuelo. Un abuelete majo, tan majo que casi es como de dibujo animado. A mi me fascina su serena inteligencia. A mi, en la discusión, me gusta el argumento duro, la imagen fuerte, el castañazo, o sea. Y me encanta del Papa que es pausado y efectivo en su argumentario. Y lo bien que se explica, siendo el teólogo más brillante desde vaya usted a saber cuánto.

Uno de sus rasgos más notables del Papa es su tierno humor. A mi, lo del tricornio me ha parecido una se sus mejores imágenes. Y la de la tormenta en la JMJ de Madrid.  Atrás, ni para tomar impulso.


En su anuncio en latín de la renuncia (he oído que algún cardenal alucinaba porque no le entendía, ay, al Logse ha llegado hasta a la Curia) ha dado una clase de catequesis, un minitratato teológico de aúpa. Nos ha dicho que ha orado y ha reflexionado sobre lo que tenía que hacer. Ha puesto en en la balanza la libertad y la responsabilidad. Ha obrado y ahora rinde cuentas ante su rebaño.
Yo es que sigo alucinando.

Como he dicho en Fenmadrid, lo que me sabe mal es que la misa en la que por sin podremos llamarle santo a San Juan Pablo II no la presidirá él, su amigo. Jo, es que vaya par, un alemán y un polaco. Hay que dar gracias por la suerte que tenemos.

2 comentarios:

Dulcinea dijo...

Hemos tenido el privilegio de ser contemporáneos de dos grandes Papas, a cuál mejor. Menudo ojo tiene el Espíritu Santo.

Altea dijo...

No todos los papas tienen la suerte de saber quién va a ser su sustituto.
En uno de tantos mensajes que se le ha enviado, vía twitter y demás, le he pedido que rece por España, ahora que se va a dedicar por entero a ello.