jueves, 26 de abril de 2012

Tonterías olímpicas






Resulta que en Londres van a hacer este verano una reunión de excesos deportivos, d eessos de conómetro y sudores, mucha tele y los saltos a la piscina, que es lo único deportivo. Bueno, eso y los gimnastas que a ver si se empotran con el plinton o no, que es lo que tienen los miedos infantiles, que yo conocía a uno muy ágil que en un mal día un poco más y se deja los dientes allí pegados, que yo lo saltaba con mucha altura, por no dejarme allí esopachurrada la dignidad. Digo, Londres, que lo organiza, como presidente del Comité del asunto un antiguo atleta que se llama Sebastián Coe, que me acuerdo yo de cuando corría, que uno s epensaba que con ese nombre tenía que ser de Albacete o así. O llanito al menos.
Me acordaba también hace unos días de la peli aquella tan renombrada y que ya nadie echa en la tele, Carros de fuego. Qué camisetas más bonitas.
Mira tú qué tontería.

martes, 17 de abril de 2012

Rita ya no trabaja aquí



Oigo que Rita ya no trabaja para Hacienda. Resulta que ya no trabaja por allí, que la jubilarían o algo, que ya le pasó hace la tira el testigo a sus hijos primero y a sus nietos después y quién sabe cómo se las compondrán ahora. Total, que con lo que temimos a Rita por un lado y a Berta, por si acaso, ya ni eso nos han dejado. Ahora nos rompe las meninges el Padre y cuando la cosa se pone peliaguda el nueve cero dos, que nos incrementa el gasto pero nos regala tranquilidad.
En fin, arranca la campaña.
Y yo me sigo divirtiendo, con perdón.

sábado, 14 de abril de 2012

Las valencias


Decía Aberasturi que él nunca entendió lo de las valencias. A mi me ocurrió lo mismo. La verdad es que nunca me explicaron bien la sustancia de la cosa. Me contaban aquello que si a uno le sobraba, las cogía del otro y así se pegaban, en plan de óxido de fosfato más anhidrido cálcico forman policarbonato de nitrato sódico, tralará. Se sumó a que no me explicaron en asunto a que descubrí que aquello no iba conmigo. Así que hice como contaba Aberasturi: responderlo a bulto.

Entonces, ¿hay que hacer transbordo en Sol dirección Paseo de Gracia?

Piensas una palabra larga y la sueltas con aplomo, como diciendo, ojito que aquí estoy yo. Eso es como de jugar a las cartas, ciertamente, pero si cuela, cuela. A ver, que si yo hubiese tenido vocación de inventar la vacuna de la malaria o algo, vale, pero con lo lejos que me quedaba a mi el mundo de las probetillas, a ver, tampoco es cuestión de molestar, así que mejor apartarse cuanto antes.
Pero el nombre me gustaba. Somos las valencias y estamos aquí para quitarte el sueño. A ver. Y la tabla periódica, que no era una tabla, era una cartulina, que parece que mucho polióxido de rinomicina, pero ni uno se da cuenta, tíos listos. Una cartulina con una fundica de plástico para no estropearla, pero de tabla, nada. Nada de nada. Y luego las reglas memotécnicas, como lo de petaca y bodega, pero en químico, que es más difícil estudiar la puñetera regla que aprendértela a lo normal.
Lo cual que a mi me molaba más el latín, por lo de la sonoridad.

lunes, 9 de abril de 2012

Los deberes y la cancha

Hay por aquí cerca una pista de baloncesto, hay quien le llama cancha, que es una cursilada imperdonable, así que en adelante pista, en la que a todas horas hay jugando unos cuantos filipinos. La tienen tomada, por la vía pacífica, que desde lo de Baler, a los filipinos se les tiene por gente pacífica y tal. Luego está lo del Frente Moro aquel, que es una cuadrilla de salvajes islamistas, perdón por la redundancia-repugnancia, que andan matando por la jungla desde hace la tira. Creo que parte del acuerdo para que Apocalypse Now se pudiese rodar allí fue que la producción dejase dos de los viejos helicópteros, precisamente para usar contra la caterva de bestias esos. Hay gente que se piensa que lo de los mojamés es cosa nueva, en fin.

Los del baloncesto están dale que te pego todo el día haciendo ruido con las cestas, porque son de chapa y cadenitas en lugar de cuerdas, algo ruidoso y pesado, como el propio Ayuntamiento que las ha puesto allí. Que enfrente haya una biblioteca confirma que son tontos y que no hay manera de recuperarlos.
Los filipinos son chiquitos y voluntariosos, dos circunstancias un tanto contradictorias para la cosa del baloncesto. Más que chiquitos, parece que estén compactados, así concentraditos, como si tuviesen un peso sobre los hombros y les tirase para abajo, achinándoles los ojos y dejándoles un poco chiquitajos. Hasta a mi, que tampoco rozo las nubes, lo normal, apañao, me hace sentir ala-pívot pero sin desgarbo, porque esa es otra, la elegancia del baloncestista es indiscutible: no existe ni por casualidad, que está pareciendo que les tengo ojeriza a los bajitos, los baloncestistas, los filipinos y los voluntariosos, y nada más lejos que eso. En todo caso una cierta admiración perpleja ante cuatro manifestaciones del ser que no poseo y que ni siquiera rondo.

Estábamos en que como no levantan mucho el vuelo, corren veloces y tiran desde lejos con no poca precisión, porque ahí está el meollo. Que a falta de altura, le echan voluntad. Y eso me parece a mi admirabilísimo. Será porque no es una de las virtudes que mejor me iluminen, me gusta la gente voluntariosa, que es como la cinta esa que llama americana, que sirve para un roto y para un descosido y le saca a uno de los apuros más estrambóticos. Eso, que con voluntad parece que se suple la falta de centímetros, y se entretienen, sin botellón ni peleas chungas, echando el día, la noche y la madrugada, que no se si serán los mismos, pero que más vale que hagan turnos, que no paran. Otra cosa será qué sería lo que deberían estar haciendo a todas horas, si lo del estudio, lo del trabajo, ambos o no sabe/no contesta.

Y ahora me vuelvo a mis cosas, que se me acumulan los deberes.

miércoles, 4 de abril de 2012

Los umbrales y los capmanys


Hace mucho, mucho un día, hablando de los monigotes de Mingote, descubrimos, ay, qué aburrido es el trabajar, que en realidad los dos vejetes eran un Umbral y un Capmany. Y así lo conté, creo, no s
e.


Por obra y gracia de la Fundación Umbral rescato esta carta que le dirigió Mingote con un hermoso dibujo,galantón y detallista para España.

He oído hoy una cosa muy interesante sobre Umbral y sobre Mingote.
Dijo un día Umbral que el ABC era Mingote y la grapa.
Y Mingote le respondió que gracias, en nombre de la grapa.

La que deben de estar liando.



lunes, 2 de abril de 2012

El marqués

Cuenta hoy en La Razón Ussía unas cosas muy divertidas a propósito de su amigo, nuestro admirado Mingote. El buen humor que nos contagia no logra quitarnos el escalofrío, el susto, el temor, porque Mingote, a sus noventa y pico, anda pachucho. Se colige que no es un suave trance y eso sabe muy mal.
Total, que una vez más, tiro de sus dibujos para honrarle y desearle lo mejor al Marqués de Daroca. Mis respetos.