jueves, 8 de mayo de 2008

El fantasma de las cadenas

Aquí donde me veis, con mis erratas –tipografías bailongas las llamo yo- y mis leñazos, mis cancioncillas y mis cuadros robados, el loquileto y el uniforme de bricoman, nunca he sido demasiado entusiasta de las cadenas.
Ya se sabe, los radicales libres somos así, y encima tenemos un tipito envidiable. Pero es lo que pasa con las reglas, las escuadras y los cartabones. Que un amigo de esta página, el entusiasta Alejops, que es nombre y saltos de alegría al mismo tiempo, me invita a participar de un asunto sobre lo que a uno le apetece y lo que le cruje. Propone seis de cada, pero como a mi no me gusta ese número y me considero, dentro de lo que cabe, mesurado y reflexivo, pondré cinco de cada y al que no le guste que pida el libro de reclamaciones. Venga, al ajo, que no llegamos.


Algunas cosas que me gustan dentro de su irrelevante intrascendencia

1. El diseño de los envases de los medicamentos, mayormente genéricos. Tan sobrios, tan faltos de originalidad, fondo blanco, color plano, letras en negrita. Pero, ¿quién quiere más?

2. La humilde letra n, que se descubrió de la castiza boina, y no como su orgullosa vecina ñ, y que aspira a unas vacaciones o al meno a un buen puente de varios ojos, como la envidiada m. En el fondo, ella sólo es una u, la más modesta de las vocales, y encima volcada. Nada de nada.


3. Encontrarme papelitos, puntos, postales tarjetas, lo que sea en los libros de viejo. Entonces me imagino la historia del lector.

4. Que me toquen pipas peladas cuando como pipas. Encontrar cacahuetes de esos chiquitos de piel muy roja. Por desgracia, ahora no localizo dónde los venden y tampoco es plan empezar a perder tiempo para encontrarlos, no seamos extremistas. Las pipas en los toros.

5. Planear la gira por Las Vegas que haremos JMMacías, JSVico y yo, en donde nos retiraremos empapados en Jack Daniels, ecándoles duros a las maquinorras y jugando interminables partidas de póquer mientras les dedicamos nuestras mejores piezas a las peroeres piezas del lugar. Nosotros ya nos entendemos.


Una serie de cosas que me desagrada y que me atormentan un poquín, pero dentro de un orden

1. El número seis. Mira, qué tontada, pero es así. Que unos me caen mejor que otros. hace tiempo escribí sobre eso aproximadamente, pero me temo que nadie me entendió. Si el seis es azul es que no lo soporto ni en pintura.

2. La camisa que no quieres que se manche y se mancha. A ver, que no soy un marrano, no quieres que se manche ninguna, pero el lamparón es proporcional (en tamaño y aparición) a la necesidad de que no aparezca, o sea. La sopa es una enemiga conocida, pero el enemigo acecha. Ojo avizor con la goma que recubre las puertas del metro para no espachurrar los dedos. Tienen mugre por un tubo. Como las ruedas de la bici, otras que tal pintan. O manchan.

3. La fruta verde. Y que las naranjas y las mandarinas no estén de rechupete. Joer, que estamos en España, que si aquí no hay cítricos decentes, ya me dirás dónde. Y últimamente pasa bastante, que digo yo que aquí dejan lo que queda para sacarle más duros por ahí fuera. Que se me repita la fruta verde. En tono levantino también, la paella congelada. Joer, ¿para eso liamos la del dos de mayo???

4. El ruido. O sea, los sonidos poco agradables y no deseados. Chirridos, alineaciones del furbo dichas a voces, politontos, topicazos, politiqueríos, resentimientos y demás basurillas. Sobre todo, porque tapan lo bonito. El papel que se arruga, la tela del abrigo al rozar la camisa -sin manchas- la cáscara del cacahuete, el hola qué tal, cómo ha ido, aquel ruido de chistorras del vinilo, las chistorras friéndose y las gotitas de lluvia. Mis adoradas gotitas de lluvia. Cuánto silencio, pero qué lejos.

5. La gente incapaz deganarse el respeto de un niño. Pero no me gusta hablar de eso.

Bueno, y ya que me he apañado las reglas como me ha dado la gana, invitro a todo aquel que se anime y se atreva a hacer algo parecido a esto. En primer lugar al propio Alejops y a Néstor, que ya lo han hecho, pero pueden repetir, que les ha quedado muy bien, y en segundo a todos los demás, sobre todo a la reencontrada amiga Carcajada, que me tiene en un sinvivir con su vida Guadiana.

19 comentarios:

María dijo...

Interesante, sobre todo ese paréntesis que has hecho en los ruidos, entre tantas cosas desagradables, para resucitar esos ruidos tan agradables. Mola.

Pd.... pasate por mi sitio que está falto de musica, joer!

Néstor dijo...

Oye, pues a mi me está esperando una paella en Alicante, a pie de playa. Si te apuntas, dejo que pagues.
PD: creo que no repetiré la experiencia. He quedado agotado. Pero muchas gracias por el ofrecimiento.

Anónimo dijo...

A mí me gustan los fantasmas con cadenas. Y lo que has escrito, que es divertido, bonito y serio. Todo junto, sí. Porque se puede.

Dulcinea dijo...

Me gusta:
1 los bebés. Puedo pasarme el rato mirándolos embobada.
2 los albaricoques. No sé por qué, pero me encantan.
3 este chat. Porque las entradas son interesantes y la gente que entra también.
4 hablar por teléfono. Cuando me engancho, me engancho.
5 ir de contenedores. El día que toca dejar trastos viejos en el barrio, me encanta curiosear lo que tira la gente, y si vale la pena, recogerlo.
6 leer. De todo y siempre. En el bus, en casa, donde sea.
7 mi bici. Es muy chula y es un regalo de mi hermano.

No me gusta:
1 el marisco. Cuando los veo me acuerdo de Alien. Puaj.
2 los coches descapotables. Me parecen una horterada.
3 las encuestas. Por sistema no colaboro cuando me preguntan.
4 el deporte. Creo que soy alérgica, o algo así ;)
5 los ligones. Sí, esos plastas que se te acercan perdonándote la vida.
6 que se metan con los débiles, enfermos, o niños. Me pongo como una leona. Grrr.
7 coser. Una tortura china. Si existe la grapadora, hombre...

Dulcinea dijo...

Me gusta:
1 los bebés. Puedo pasarme el rato mirándolos embobada.
2 los albaricoques. No sé por qué, pero me encantan.
3 este chat. Porque las entradas son interesantes y la gente que entra también.
4 hablar por teléfono. Cuando me engancho, me engancho.
5 ir de contenedores. El día que toca dejar trastos viejos en el barrio, me encanta curiosear lo que tira la gente, y si vale la pena, recogerlo.
6 leer. De todo y siempre. En el bus, en casa, donde sea.
7 mi bici. Es muy chula y es un regalo de mi hermano.

No me gusta:
1 el marisco. Cuando los veo me acuerdo de Alien. Puaj.
2 los coches descapotables. Me parecen una horterada.
3 las encuestas. Por sistema no colaboro cuando me preguntan.
4 el deporte. Creo que soy alérgica, o algo así ;)
5 los ligones. Sí, esos plastas que se te acercan perdonándote la vida.
6 que se metan con los débiles, enfermos, o niños. Me pongo como una leona. Grrr.
7 coser. Una tortura china. Si existe la grapadora, hombre...

Dulcinea dijo...

Me gusta:
1 los bebés. Puedo pasarme el rato mirándolos embobada.
2 los albaricoques. No sé por qué, pero me encantan.
3 este chat. Porque las entradas son interesantes y la gente que entra también.
4 hablar por teléfono. Cuando me engancho, me engancho.
5 ir de contenedores. El día que toca dejar trastos viejos en el barrio, me encanta curiosear lo que tira la gente, y si vale la pena, recogerlo.
6 leer. De todo y siempre. En el bus, en casa, donde sea.
7 mi bici. Es muy chula y es un regalo de mi hermano.

No me gusta:
1 el marisco. Cuando los veo me acuerdo de Alien. Puaj.
2 los coches descapotables. Me parecen una horterada.
3 las encuestas. Por sistema no colaboro cuando me preguntan.
4 el deporte. Creo que soy alérgica, o algo así ;)
5 los ligones. Sí, esos plastas que se te acercan perdonándote la vida.
6 que se metan con los débiles, enfermos, o niños. Me pongo como una leona. Grrr.
7 coser. Una tortura china. Si existe la grapadora, hombre...

Álvaro dijo...

Hombre, no me negarás que algo rarito sí que eres. Porque preferir la ´n´antes de la mejestuosa ´ñ´con el porte que tiene, es un delito. Pero bueno, será por gustos.

Yo, soy más del número 7.

Un saludo

Nodisparenalpianista dijo...

María, voy a bailar un twist lleno de ruidos silenciosos de esos que me gustan.

Néstor, tu mala fama de abogado te precede, chato. Pero oye, te quedó muy bonito, si señor.

Jo, Marta, pues me alegro.

Jo, Dulci, qué molón!!!! Oye, pégalo en la Bulla y que las otras bullangueras se retraten, que Rocío vale, pero Marta y María son un par de vagas de tomo y lomo.

AmatíaTrenti!!! Qué alegría verte de nuevo por aquí!!! Bueno, en ralidad yo admiro la elegancia de la boina, pero era por juguetear un poco. El siete mola, pero creo que está un poco sobrevalorado. A mi me gusta más el sinuoso cinco y el solitario uno, pobre, majo, pero como ausente, ¿no?

Atiza dijo...

En mi caso, para poner lo que me gusta y lo que no aguanto,uf! necesito una güep y no darle la lata al pianista. De momento como abra un frente más, me da un Siroco. Y no es cuestión.
Por cierto, odio el teléfono que suena y no cojo.

J. dijo...

Lo de las pipas. Ahí estamos, pianista. Las pipas. Peladas. Qué regalo. Ah, los que vivimos los 80... cómo sabemos apreciar estas pequeñas cosas.

¿Y el loquileto? ¿Dónde, eh?

Anónimo dijo...

En referencia a lo tuyo, yo adoro la fruta verde. Es más, sino está verde no la como. ¿Y cómo que no te gustan las alineaciones de fútbol? La cantinela es buena.

Dulci, a mi también me encanta el teléfono. Aunque prefiero el cara a cara.

Lidia.

Adaldrida dijo...

¿Puedo, puedo, puedo? ¡Me encantan las enumeraciones?

Adaldrida dijo...

Pues a mí siempre me gustó el número cinco. Ahora ya no tanto, porque ya sé que tiene rima, y yo tan inocente... siempre me ha gustado, tan musical, tan redondo...
Como sé que sí que puedo (eres un buenazo), te planto las cinco cosas que me gustan:
1) Los hombres vestidos de traje y corbata. Son irresistibleees!!!
2) La cocacola. Cada vez me gusta más: ¡despierta!
3) Las librerías de provincias que venden poesía, son pa perderse en ellas.
4) los buenos poemarios, son pa perderse en ellos.
5) Las piscinas, es atracción fatal lo que siento por ellas.

Adaldrida dijo...

Y lo que no:
1) El ruido, también lo odio.
2)la gente que va de guay dejando tirado a todo el mundo, no puedo soportarlo.
3) Los que no hacen más que decir que Rajoy tiene que irse. ¡Yo quiero a Rajoy!
4) Los que se autodenominan comprometidos sólo porque reciclan las basuras.
5) Las acelgas judías verdes hablas y coliflor, es decir, toda la verdura salvo las espinacas que sí me gustan.

Nodisparenalpianista dijo...

Atiza, no das la lata, por lo menos aquí, aunque te animo a que abras un garito. Creo que sería asiduo. Venga, el órdago está echado.

Jaja, J (punto), el loquileto siempre a punto para asaltar bancos y museos. Y con unas bolsas de pipas para los viajes largos.

AnónimoLidia me encanta todo lo que nos gusta distinto. Porque no es nada en realidad.

Claro que puedes, RocioArana... además, aunque me negase, la lista llegaría igual. Oye, muy bien, porque las corbatas me quedan de miedo, aunque las uso bien poco. Pero lo de las verduras... casi tan imperdonable como lo de la fruta verde de AnónimiLidia. O sea, que mola.

Paco Becerro dijo...

Pipas peladas...

Eso ya es gula o vicio...

Que unos tenemos la fama pero...

Atiza dijo...

Gracias, pianista. En otros, sí que la doy, y mucho. Y más que la voy a dar si me dejan.
Me temo que tu órdago va a ser a la chica y ya sabes: jugador de chica...

Nodisparenalpianista dijo...

FutBlo, aquí el tragón cum laude eres tú, lo nmió sólo es alegría en la pereza... aunque de eso, de pereza, tú también sabes un rato. Y de alegría creo que también!!!

Atiza, no doy una baza por perdida y no te fíes de los refranes: lo mejor es cargárselos. Mantengo mi órdago. Y NéstroWilson me apoya. Sigo recogiendo firmas.

Adaldrida dijo...

EDITO: después de lo que está pasando, creo que ya no me gusta tanto Rajoy...