miércoles, 3 de octubre de 2007

El día 3

Igual la memoria me traiciona, pero diría que no. Creo que el curso solía empezar el día 3. El 3 de octubre. No se, ahora igual empieza otro día, igual ya llevan un mes, igual les faltan dos semanas, lo que sea, pero ahora hablaba de lo mío.
Para esa fecha solía llevar ya unos días en Pamplona, para dejar los trastos, poner un cierto orden, ordenar los libros, colocar el Espasa de cabecera, ir cogiendo ritmillo. Papeles de matrícula, gestiones, las cosas. ¿Un cine? Venga.
En octubre aún salen días calentitos pero el fresco ya está ahí. Manguitas, cazadoras, la tejana fina, se empieza a estar bien. La gente, con ganas de pasear.
En el Paseo Valencia, como dicen los castizos, Paseo Sarasate para los modernos, al pie del Monumento a los Fueros, montan los chiringuitos de la Feria del Libro. No es enorme, ya nos entendemos, que el Viejo Reyno da para lo que da, pero tiene un paseo estupendo. Y encuentras cosas. Una vez me compré una reproducción de un mapa de Navarra antiguo que aún anda pèndiente de ponerle un marco, y que es una preciosidad. Otra vez, creo que fue en primero, me compré dos o tres libros de Nietzsche. Era joven y tontorrón, cierto. Cosas que pasan.

Este es el lado de la Iglesia de San Nicolas que da al PSeo Vlencia, en donde había, Oh tempora, una oficina de Banca Catalana. A mi me gustaba más el otro lado -pero no tengo mis fotos a mano hoy-, con los arcos en donde ponían un mercadillo jipilongo los fines de semana. Aún guardo un pañuelo que me regalaron allí. Ay.


Aquella tarde de domingo iría o coincidí allí con Alberto, Encarna y los críos. Recuerdo que era domingo por lo que explico. Resulta que, aupa, hola, pasapues, me dicen que van a ver a los padres de Alberto, que si me apunto a la meriendilla. Y, bueno, no se, joer, por no molestar, quita quita, anda majo, vente. Oye, que ya se sabrá el fútbol. Y entonces, entre los paseantes de las casetas, los que llevan a los críos con los globos, los que llegan tarde al cine, los que salen del cine pronto, los de misa de ocho en San Nicolás, los que va a tomarse un frito de huevo del Museo, aparecen unos tíos con uan especie de hoja plegada llena de numeritos. En medio minuto las reparten a veinte duros cada una, o diez, no se, entre la marabunta que les rodea y que al minuto se disuelve. Alberto se ha hecho con una. Y lee. Osasuna Murcia, Real Sociedad Hércules, Valencia Cádiz, Real Madrid Gijón, o los que sea. Resulta que tiran unas hojas volanderas con los resultados de la jornada, la quiniela, las clasificaciones, las cosas del furbo. Allí, quien más quien menos se la compra, se la estudia y se va a tomar un vino para celebrarlo o para ahora las penas,. ¿Un claro con gas en el Museo? ¡Y un frito de huevo! que parece un mosqueo, pero está muy bueno. Está muy bueno para el que le guste, porque a mi me sabe a perros, la verdad. Pero oye, cada cuál con sus aficiones. Yo iba con libros de Nietzsche.
El curso se abría. Hay un acto oficial en el Aula Magna, discursos, apertura, Faus el profe de Radio haciendo de Maestro de Ceremonias, con su chaqué o frac, que siempre me lío de color gris y su cabellera blanca, que era verle y cuadrarte delante de él y de su potente chorro de voz, y el paseillo. El paseillo era el cortejo académico de los profesores camino del Aula Magna, a través de uno de los pasillos del Edifico Central. Aquello era, con todos los respetos, como un encierro a cámara lenta y corrido por piecitas del parchís. Cada facultad con su color, cada profesor con su birrete y su muceta del colorín que le toca.


He buscado pero no encuentro estampas del encierro. Ahora no tengo a mano las revistas de la Facultad para pegaros una escaneada, así que con esta os apañáis. Para los que tenéis buen ojo, podéis ver a los amarillos, unos colorados al fondo y detrás los de periodismo. De hecho, hasta conozo a alguno de la foto, jolín.


Los míos van de gris perla, lo que no hace honor a la explosión de colorido que solemos ser, pero a veces es mejor pasar desapercibido que parecer el Carnaval de Río, ya me entendéis. O no, pero es igual.

Un año fui a ese encierro, también sería primero porque no me sonaban los profes. Allí, algunos estudiantes vacilaban pero en voz baja, dentro de un orden. A mi me pareció un acto muy bonito, que le da carácter, empaque, clase, conciencia de importancia a la propia Universidad. Que le da un rango mayor que el de una panda de greñudos dando lecturas (o no) que entran para examen. Igual alguno lo entiende como una manifestación de clasismo, de pretenciosidad absurda, de prepotencia o así. Bueno, cada cuál que piense lo que pueda, pero si tiene oportunidad que lo conozca y que luego opine. Pero no iba por ahí hoy.

Luego llegaba el día tres. Horarios en el tablón, ¿pero dónde está el aula C2? ¿cuándo nos harán a los de Periodismo un edificio? ¿un café? ¿¡horario de tarde!? Primeras clases. Primeras listas de libros. Con Ramón, si, ese Ramón, que quedamos para ir a buscar libros a Gómez, a Biblos a la Universitaria, que llamo a casa para que me encarguen el Gombrich, que compramos algo en las casetas de la Feria, pero por el puro vicio de leer, le doy a Camus, que ese si me sigue gustando, un zurito en La Granja, La granja que de tarde no se parece a La Granja de los tequilazos nocturnos antes del Bodegas, qué Ramón, ¿nos volvemos a Barañáin? el año que viví allí.




Este señor así antiguo es el librero Tino Gómez, del puesto de la librería Vetusta de Gijón en El Paseo Sarasate o Valencia, según. Yo me veo comprándole un libro.

Así iban pasando los días de aquellos octubres en los que el naranjoso de los estertores finales del verano se mezclaban con el verde césped frío, a vceces cortado, a veces húmedo de rocío, a veces sencillamente bello que pisábamos camino de nuestras nuevas clases de siempre mientras soñábamos con las nuevas cosas de siempre, unas buenas prácticas, unos bailes en Más y Más, la chiquita quella del final de la lista o cabalgar a lomos de un rocín entre granate marrón oscuro negro, saltando sobre los setos que había cerca de Belagua. Y atarlo en el gusanito del Edifico de Arquitectura.

Todo eso, alrededor, el 3 de octubre. O así.

20 comentarios:

Anónimo dijo...

Menuda morriña tienes tú del Campus y de tu Facultad. Y no es para menos, con todo lo que hay allí para paladear.

!El mercadillo de San Nicolás...!Me encantaba revolver en los puestos de los jipis. Me compré una vez un bolso de trapo, muy yeyé. Y otra vez una camisa blanca bordada que luego jorobé en la lavadora. Y otra vez...

Belén dijo...

Te cundia a ti el mes de octubre si...jajajajjajaja

Yo leia a jardiel poncela, jajajajajaj

besosssss

Paco Becerro dijo...

Qué tiempos. Con lo que tú has sido pianista...

J. dijo...

Ah, nostalgia.

1- Si, pianista, ahora las clases empiezan antes -este año el 24-.

2- El edificio de periodismo se inauguró con mi promoción 96-2000. El segundo año ya tenía grietas.

3- Estamos en la feria del libro viejo, ya me han dicho de algún libro interesante. Sigue instalándose en el mismo sitio.

4- Los pinchos del museo, siguen siendo el referente.

5- Barañain es Manhattan.

6- De la foto, conozco a tres.

7- El Paseo Sarasate es el recuerdo primero que me vine de pamplona, cuando estoy lejos.

Ah, nostalgia.

María dijo...

buena entrada!!!

Que chula la foto del librero!!! yo, con semejantes libros también me veo comprándole... incluso de Nietzche (anda que leer Nietzche... raro es que no te deprimieras, o que no te conviertieras en super hombre...jejejeje)

Vaya! ¿no tenías edificio de Periodismo? Pianista... vale, no haré ningun comentario respecto a ésto... ;)

Y lo que dices de los colores de las mucetas... ¡¡muy bueno!!! jajajajaja

Anónimo dijo...

¡¡Mira que hoy has escrito largo también!! Que primero me lo he leído en dos partes y luego otra del tirón. Y qué bonito lo que cuentas. Un poco nostálgico, como dice Javi pero muy bien.

Anónimo dijo...

Qué suerte tienes de tener recuerdos de la universidad. Yo ya ni me acuerdo... O tempora, o mores!
(me ha dado el bajón, me bajo al bar).

Paco Becerro dijo...

Y hoy no hay chat? Lástima, hoy que estaba por aquí...

Por cierto PIANISTA, ¿qué vas a hacer con esas encuestas? Las comentas, las quitas, se las vendes a Demoscopia, danos datos.

Carcajada dijo...

Qué nostálgico te has levantado hoy! supongo que algún día yo me sentiré así, pero hoy por hoy sólo tengo ganas de acabar, pero esto va para largo. Besos!

Nodisparenalpianista dijo...

Pues una poca Dulci, pero y lo bien que queda. Yo es que en un mercadillo jipi me acuerdo del Imperio Romano, echo mano de la cartera y del collar antipulgas, por lo que pueda pasar. del imperio por la añoranza del agua corriente, digo.
Belén, ¿lo leías debado de un almendro? Te alabo el buen gusto.
Jaja, FutBlog, lo que yo he sido y tú que lo cuentes!!
Pues si J, (punto), la nostalgia ya no es lo que era. Sin duda, se precipita el comienzo de curso; el Edificio sin percheros que tiene el Oratorio más hermoso y que no osaron usar; la feria, en el Paseo Valencia, jaja; Barañáin es Manhattan pero sin Woody Allen, aún hay clases; ¿tuviste a uno de esos de profe de prácticas de radio? Viva nuestra casi compartida nostalgia!!!
Juajua, María, ¿quién te ha dicho que no suy un superhombre? Superpianista al menos...
Marta, la nostalgia es larga y hermosa. Bueno, casi siempre. En este caso al menos. Tanto para J (punto) como para mi, seguro.
Néstor, qué rostro. ¿Mañana me dirás que estás de resacón verbenero por mi culpa????
Jo, FutBlog, ¿tú también quieres chat? Voy a tenert que empezar a planteármelo... o mejor que se lo curre María.

Nodisparenalpianista dijo...

Carcajada, aunque aún no lo sepas, estás construyéndote esa nostalgia. Hasta echarás de menos las ganas de terminar.

María dijo...

Futblo quiere chat y el pianista quiere que me lo curre... ¡¡pues aqui estoy!! jejeje lo que pasa es que esto funciona mejor los domingo que entre semana la gente está más ocupada... haremos un llamamiento a la fiesta y si no... pues convocamos otra otro dia... ok?

echar de menos las ganas de terminar... puf! que complicao!! Carcajada... yo también tengo ganas de acabar ya!!! (espero que lo mio no vaya ya para muy largo!!!)

Superpianista (jajajaja) gracias por invitarme a montar un chat en tu sitio!!! juajuajua ;)

Paco Becerro dijo...

Bueno y las encuestas qué?

María dijo...

eso, eso pianista, cuéntano qué haces con los resultados de la encuestas... ¿sirven para algo nuestros votos? o "metes la mano" y pucherazo?? ¡¡¡queremos que publiques los resultados!!! jejeje

Nodisparenalpianista dijo...

María, es imposible sentir nostalgia de un chat, así que queda proscrito. Si, si, ya verás como en la cena que montará Néstor dentro de diez años me daréis la razón las dos.
FutBlo, que la vida no me da para más, encuestas, chaticos, nostalgias, jolín.
María, me paga la gallina. Son cosas suyas...

María dijo...

jajaja ¿las dos?... la le explicarás e Néstor este "lapsus" juajuajua... los chats tardan años en prescribir... anda que no queda para que esto prescriba! jejeje

Adaldrida dijo...

Mira que eres ladrón, poner esto justo cuando vuelvo de Pampaluna. Snif. ¡Y yo también viví en Barañáin!

Nodisparenalpianista dijo...

LAs dos, Carcajada y tú, que tanto queres un chat, María, guapa y no te enteraaassss!!!! Expulsión técnica ya!!
Ladrón d ememorias, Rocioarana. Todos tuvimos un mal día en Barañáin. Jaja, me ha hecho gracia leer tu entrada de hoy, de vuelta y añorada. Imagínate dentro de diez años en la cena de Néstor...

Anónimo dijo...

Ah, pero ¿era cena? El caso es que he contratado una comida. Lo de la cena se me sale del presupuesto, así que espero que no os importe terminar en el Burguer King (además podemos jugar en el parquecillo ese para niños).
En fin, que ya me diréis.

Nodisparenalpianista dijo...

Me parece que si hay priba, Néstor, a estos les da igual lo que les echen de comer...