viernes, 24 de octubre de 2008

Tres segundos

Una racha de aire frío, sorprendente y nocturna me regala una lluvia de color naranja. Se ve mal, porque las farolas están como están e iluminan lo justo como para que las sombras campen a sus anchas y sólamente se vea al que se apoye bajo ellas en plan mujer fatal. Pero están allí. Las veo caer a mi alrededor, silbando junto a mis gafas, las hojitas de las florecitas esas que tenían que haber salido el mes pasado, pero que por cosas del calor, del frío, del sol o de la lluvia, me parece que este año no salieron. A cambio, hace unos días el suelo estaba tapìzado de una especie de bolitas verdes que al pisarlas se converían en una frutita amarillenta y resbaladiza que por pequeña le incitaba a uno a la piedad más que al resbalón, por lo que pudieron ser y no fueron. Lo que es la vida, o sea.


Este es un árbol parecido al que cuento hoy, cosas buenas del ayuntamiento, que cuando acierta, hay que reconocerselo, nobleza obliga. La foto es de la misma tanda que la que pegué en esta entrada, otra sobre cervezas, Sander y lluvia de flores. Gustó bastante y, según he visto, no terminé de contestar.
Aprovecharé para hacerlo ahora.


Dura tres segundos, creo, lo que es rebasar andando los tres árboles que me iban lloviendo. Tras ella, tras la lluvia, unos que van, vuelven, siguen de fiesta. El del bar de copas que habla con uno en la puerta, porque no hay nada más que hacer, los de la tienda de cárnicos prefabricados en envase de plástico reponen género como a escondidas, hay una furgoneta aparcada de unos que venden artilugios de los de hacer cochinadas, esquivo un charco, hay una mesa rota abandonada y la ambulancia enciende la sirena en los cruces, esquivo otro charco.
Tres segundos, pétalos amarillos, termina el día.

12 comentarios:

Néstor dijo...

Lluvia, viento, frutos, árboles, noche, vida... ¡Qué buenos ingredientes para unos segundos de vida tan bien contados!

Paco Becerro dijo...

O sea.

Bonito

maria jesus dijo...

Es que lo explicas que va uno a tu lado

Anónimo dijo...

¡¡Me encantaaaaaaa!!

Myriam dijo...

Bueno, muy bueno Pinista.:)

María dijo...

Madre mía,que tres segundo tan intensos!!!.
"LLuvia-de-bolitas-verdes-que-si-los-pisas-se-convierten-en-un-fruto-amarillo-que-resbala". Creo que voy a cambiar el nombre de mi blog! ;)

Anónimo dijo...

La lluvia y tu. Te propongo algo. ¿Por qué no escribes un libro de relatos cortos con experiencias lluviosas?

Es bonito. Pero es que a mi esto de la lluvia me pone de un mal humor...

Lidia

Zerepica_n dijo...

Impresionante. Pero, por qué jaicutre?

Nodisparenalpianista dijo...

Tres segundos al día al menos, Néstor. Algo es algo.

FutBlo, eso. ¿Pero tú no estás en Tanzania? ¿Te conectas desde una Wifiliana?

Es una sensación bonita, María Jesús. Gracias!!

Martaaaa, los clavos arden!!!

Jeje, Myriam achicharrarroces, gracias!!!!

María, no merezco tan alto honor!!!

Tendré que hacer algo, AnónimoLidia, si... Oye, a ver si me cuentas qué tal, que no hay quien te pille, maja.

Jaja, gracias, Zere. Ers una broma que formamos en el blog del añorado peter. Él hacía haikus, los pegaba de otros, los explicaba. Un día me saqué una versión de la manga en plan chusco y le di la categoría de jaicutre. Pincha aquíy verás.

Altea dijo...

Snifff! Me ha parecido que hasta olía bien.

Dulcinea dijo...

Pues sí. Francamente bueno. Estoy con Lidia en lo de que deberías escribir. Es lo tuyo, Piansita.

Nodisparenalpianista dijo...

Altea, no te miento: en estos casos prefiero no oler: con tanto jipi, me temo lo peor. Y gracias

Ja, Dulci, AnónimoLidia y tú me sobrevaloráis, pero se agradece!!!